— Yoga, salud y bienestar —
El cuerpo es tu templo. Manténlo puro y limpio para el alma que vive en él.
B.K.S Iyengar.
Yoga y GRD
El Yoga es una disciplina holística originaria de la India y de tradición milenaria.
La palabra «Yoga» proviene del sánscrito y significa unidad, porque simboliza la unión del cuerpo y la mente a través de la práctica física, mental y espiritual.
Sin embargo, el aspecto más difundido en Occidente y el tipo de yoga que se ha popularizado con mayor intensidad es el conocido como Hatha Yoga, el yoga de la fortaleza y armonía del cuerpo, «basado en el control del cuerpo por medio de posturas (asanas) y técnicas de control de la respiración (pranayamas), que actúa como una preparación para el acceso a formas meditativas del yoga».
Este aspecto físico y los múltiples beneficios de salud y bienestar que reporta, unido a su rápida y sólida implantación en España, especialmente en los últimos años, ha generado un reciente y necesario desarrollo normativo con el fin de regular esta actividad y garantizar así la seguridad y salud de los cada vez más numerosos usuarios y practicantes. Dicha regulación normativa ha venido a "equiparar" la práctica de Yoga con la práctica de una actividad física/deportiva, a pesar de que como hemos mencionado, el aspecto físico es sólo uno de los aspectos del Yoga.
En este contexto nace el Grupo de Recreación Deportiva ANANDA YOGA, una asociación privada sin ánimo de lucro inscrita en el registro de entidades deportivas de la Comunitat Valenciana, cuyo fin exclusivo es el fomento y la práctica de Yoga como actividad física, de acuerdo a los principios filosóficos y de la ética de la tradición del Yoga.
Yoga como actividad física
La dimensión física del Yoga, se caracteriza por la ejecución de técnicas de ásanas (posturas), según las variantes, y con un dominio tal que permita la obtención de estabilidad corporal y la armonización de los sistemas energético y nervioso.
Estas técnicas se coordinan con la respiración para
incrementar la fluidez de la circulación sanguínea, mejorar la flexibilidad en
las articulaciones, facilitar la descompresión discal y obtener fortaleza,
estabilidad y calma. Entre ellas se encuentran las técnicas de ásanas invertidas, de flexión y extensión de la columna vertebral, de torsión, de lateralización, de equilibrio, de meditación o de relajación.
La gran variedad de ásanas existentes se han desarrollado a lo largo del tiempo para ejercitar cada músculo, cada nervio y cada glándula del cuerpo, adquiriendo con ello flexibilidad, tonificación muscular, coordinación, mayor rango de movimientos, relajación, concentración, y en última instancia, preparación para la meditación.
En cada práctica se combinan distintas ásanas de acuerdo a una secuencia programada en función del propósito de la sesión. El control del tiempo de mantenimiento de las posturas, las transiciones de unas asanas a otras, que pueden ser más pausadas o más dinámicas, y el control de la respiración (inhalación, exhalación y/o retención) determina el beneficio físico y mental que se obtiene.
Desde un punto de vista fisiológico la práctica del yoga se considera un ejercicio isotónico, excéntrico y aeróbico: el músculo se alarga en su longitud y se utiliza oxígeno en el mantenimiento del estiramiento muscular.
Este es uno de los aspectos que diferencia la práctica del yoga de la gimnasia muscular dinámica (correr, aerobic, ciclismo, etc.), en la que se realiza un ejercicio isométrico y anaeróbico: el músculo no varía en su longitud, se encuentra contraído y en tensión = potencia lo que condiciona la no utilización de oxígeno para mantener el trabajo muscular, favoreciendo la presencia de fatiga muscular a consecuencia de la anaerobiosis.
La relajación muscular como ejercicio isotónico, excéntrico y aeróbico, no genera cansancio muscular ni fatiga. Durante la duración en el ásana, es decir, durante el tiempo que mantenemos la postura, la actitud correcta es la relajación muscular y atención mental concentrada.
Importancia social del Yoga - ONU y UNESCO.
El reconocimiento internacional a la importancia de esta disciplina, en tanto que práctica saludable, especialmente antiestresante y relajante, apoyado además por su rápida expansión y consolidación en Occidente, ha sumado en los últimos años el respaldo de dos importantes organizaciones internacionales.
El 11 de diciembre de 2014, la Asamblea General de las Naciones Unidas proclamó el 21 de junio como el Día Internacional del Yoga, con la resolución 69/131, en reconocimiento de su popularidad universal.
Dicha Resolución manifestaba:
"Haciendo notar la importancia de que las personas y las poblaciones adopten decisiones más saludables y modos de vida que propicien la buena salud,
Recalcando el hecho de que la salud mundial es un objetivo de desarrollo a largo plazo que exige una cooperación internacional más estrecha mediante el intercambio de las mejores prácticas encaminadas a la adopción de estilos de vida individuales que no incluyan excesos de ningún tipo,
Reconociendo que el yoga ofrece un enfoque
holístico de la salud y el bienestar,
Reconociendo también que difundir más
ampliamente la información relativa a las ventajas que entraña practicar el
yoga sería beneficioso para la salud de la población mundial,
1.
Decide proclamar el 21 de junio Día Internacional del Yoga;
2.
Invita a todos los Estados Miembros y Estados observadores, las organizaciones
del sistema de las Naciones Unidas y las demás organizaciones internacionales y
regionales, así como a la sociedad civil, incluidas las organizaciones no
gubernamentales y los particulares, a observar el Día Internacional de manera
apropiada y de conformidad con las prioridades nacionales, a fin de concienciar
sobre los beneficios que reporta practicar el yoga".
En 2016 el Yoga fue declarado Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la Unesco, que lo describía así: "La filosofía subyacente a la antigua práctica del yoga en la India ha influido en numerosos aspectos de la sociedad de este país, que van desde la salud y la medicina hasta la educación y las artes. Basados en la unificación de la mente, el cuerpo y el alma para mejorar el bienestar mental, físico y espiritual, los valores de yoga constituyen una parte importante parte del ethos de la comunidad. El yoga combina la adopción de una serie de posturas, la meditación, el control de la respiración, las salmodias y otras técnicas que tienen por objeto lograr la realización personal, mitigar cualquier sufrimiento experimentado y facilitar el acceso a un estado de liberación. El yoga lo practican las personas de edad y las más jóvenes sin discriminación alguna por razones de sexo, clase social o religión, y su práctica se ha popularizado en el mundo entero."